22.5.09

Los héroes anónimos.

Este post es motivado por una nota que leí en la versión digital del diario Clarín, en realidad un video adjunto que hacía referencia a un programa Inglés que busca talentos "Britain's Got Talent". Es bien conocido por la repercusión que tuvo Susan Boyle. Esta mujer de más de 40 años, que canta desde los 12, con una apariencia socialmente al margen de los parámetros que hoy se manejan en la sociedad, fue una revolución por la calidad de su voz y talento.

Ella contaba que iba en busca de un sueño. Primer cosa que admiro… cuando los sueños no se apagan a pesar de los años y las frustraciones, en especial en algo tan difícil como diferenciarse en el mundo del arte.También pude observar algo en su forma de andar, como una suerte de presencia a tierra leve pero en movimiento. Me gusto su andar, una mezcla de ingenuidad, picardía y presencia.

El diario decía:
Boyle se convirtió en noticia para todos los medios del planeta cuando conquistó el reino de Youtube: el video de su actuación en Got Talent fue visto cien millones de veces en sólo nueve días. "Internet no ha visto nunca algo como Susan Boyle, cuya popularidad en la red se encamina a los libros de Historia", arriesgó The Washington Post. Según informó la agencia Reuters el miércoles último, su video ya ha alcanzado 186 millones de visitas, cifra que lo coloca en el quinto puesto de los más vistos en la historia de Internet.

Y con esto quiero dejar a esta mujer con su historia y focalizar sobre el resto de las personas, que como yo, curiosean sobre el fenómeno. Creo que para ellas Susan está más cerca que otros miles de artistas que desfilan en las alfombras rojas con aires exclusivos.

En lo personal me conmueve que lleguen a su sueño los anónimos. Aquellos que como el resto de los elegidos tienen su luz propia, sueños, deseos por cumplir. Me harta saber que la valoración está siempre puesta sobre los mismos, “los exitosos” que por apariencia o poder llegan a lugares donde miles de otros no pueden acceder.

Desde el año pasado que empecé a trabajar en estudios etnográficos, como este año que sigo y se le suman nuevos espacios de niños hacia los cuales abrir la escucha para tomar su voz. Encuentro que la vida está llena de héroes anónimos, de figuras casi invisibles llenas de potencia.

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